EL CALCIO HAY QUE BUSCARLO DONDE SEA

No hay nada que discutir cuando se te dice que hay que comer algunos alimentos porque son buenos para nuestro cuerpo, esto pasa sobre todo con la leche y sus derivados pero el mayor problema de eso es que no a todo el mundo le gusta la leche, entre los que me incluyo. Pero por fortuna, existen alternativas para no tener que tomar leche directamente y poder comer cosas que aporten calcio a nuestro cuerpo. El principal es el queso, ¿qué sería de nosotros sin el queso? no me podrá gustar la leche pero me encanta el queso, pero no todos los quesos, ya que los quesos de olor y sabor fuertes no me gustan nada.

 

Pero también hay gente a la cual no le gusta el queso y no por ser intolerantes a la lactosa, sin ir más lejos la novia de uno de mis amigos se toma la pizza sin queso, algo que me pareció increíble cuando me lo dijo la primera vez. Con el tiempo te acabas acostumbrando pero hay que reconocer que suena muy raro. Cuando pedí la primera pizza con esta pareja a los de la pizzería no les pareció tan extraño que una parte de la pizza no tuviese queso, y eso seguro que es porque hay más gente parecida que tampoco quiere la pizza con queso.

 

Los yogures también son una fuente de calcio estupenda, y además los hay de diferentes sabores, con lo cual casi todo el mundo tiene la opción de comer el que más le guste. Aunque por desgracia también hay gente a la que incomprensiblemente tampoco les gustan los yogures. Para esta gente a la que no le gusta ni la leche, ni el queso, ni los yogures casi solo les falta buscar pastillas de calcio en la farmacia o en algún otro punto de venta de este artículo. Aunque supongo que la gente se tomará estas pastillas como último recurso, ya que la gente normal ya toma suficiente calcio si tiene una dieta más o menos equilibrada. Y además, estas pastillas no es que sean lo que se dice baratas.