¡Qué difícil es regalar!

Siempre intento ser lo más original posible a la hora de regalar, pero cada año que pasa es más difícil. Cuando le llevas regalando cosas a una misma persona durante años y años llega un momento en que ya no sabes qué hacer. Pero siempre hay que intentar superarse porque considero que el regalo es una forma de decir: “te conozco y sé lo que te gusta”.

No podemos caer en los errores de alguien como Homer Simpson, que regaló una bola de billar con el nombre de Homer a su mujer… a la que ni siquiera le gustan los bolos. Para regalar hay que pensar como pensaría la persona a la que le vas a hacer el regalo, y dejar a un lado nuestros propios gustos. Los fallos con los regalos casi siempre se deben a dos circunstancias: porque no conocemos bien los gustos de esa persona o hemos pensado más en nuestros gustos que en los suyos.

A mí mujer le gusta bastante la ropa de firma. Yo no suelo regalar ropa porque me hago un lío con las tallas, pero en este caso he estado mirando para Comprar Camisetas Polo de mujer porque sé que ella había buscado algo similar últimamente. Me aseguré de que no compró nada utilizando un viejo truco: “oye, ¿has pedido algo últimamente por internet?, porque yo voy a comprar tal o cual cosa”.

Sé que no es un regalo muy original, pero existe una segunda clase de regalo que constituye la mejor opción en caso de que no se le ocurra a uno nada demasiado original: el regalo práctico. Detectas una necesidad y vas a por ella.

En este sentido, considero que las personas se dividen en dos tipos: los que prefieren los regalos originales a toda costa, aunque conlleven un mayor riesgo de fallo y/o de inutilidad, y los que prefieren los regalos prácticos: necesito calzoncillos pues regálame calzoncillos. Al Comprar Camisetas Polo de mujer sé que estoy optando por la segunda opción, pero como compensación buscaré algún regalo sorpresa de última hora en el que espero sorprender.